Bastante pacífico, pero tenga en cuenta que es una especie depredadora. Por desgracia, a menudo se vende como un habitante del fondo para la comunidad de peces más pequeños, una situación que debe haber llevado a la muerte de innumerables neones, guppies y especies de tamaño similar. En realidad, sólo es adecuado para tanques espaciosos con ocupantes que no puedan tragarse. También puede molestar a los compañeros de tanque que se mueven más lentamente (como muchos cíclidos) con sus niveles de actividad y sus largos barbillones, especialmente por la noche o cuando se alimentan. Por lo tanto, las especies robustas y activas son los mejores compañeros de tanque. Los peces arco iris, los characines de tamaño medio a grande, los ciprínidos y los peces gato resistentes como los loricáridos o los doradidos son todos adecuados.
Aunque un solo espécimen puede sobrevivir por sí mismo, es una especie de cardumen por naturaleza y será mucho más extrovertido y activo cuando se le mantenga en un grupo de seis o más. Si se mantiene solo, tiende a permanecer oculto durante las horas de luz, emergiendo sólo después de apagar las luces.
Mantenimiento
Se desenvuelve mejor en un entorno poco iluminado, con mucho espacio para nadar y algunos escondites que le proporcionen seguridad. No se le verá moverse tanto en un acuario bien iluminado, excepto quizás a la hora de alimentarse. En condiciones de poca luz, se moverá en la mayoría de los momentos del día una vez que se haya asentado. Como con la mayoría de los siluros, es preferible un sustrato de arena fina. La adición de algunas raíces y ramas de madera flotante y quizás algunas piedras lisas y redondeadas ayudaría a simular el tipo de entorno fluvial que la especie habita en la naturaleza. Si lo desea, puede utilizar plantas, pero elija especies resistentes como las anubias o el helecho de Java, ya que no tienen requisitos particulares de iluminación. También se pueden cultivar pegadas a la decoración, lo que ayudará a maximizar el espacio disponible en el suelo.
La filtración debe ser potente y eficaz, preferiblemente con un buen caudal. Es esencial un régimen estricto de mantenimiento, ya que, al igual que otros «pims», es sensible al deterioro de las condiciones del agua y suele perder sus barbos. Los cambios parciales de agua semanales deben considerarse una obligación.
